El juego de Ender se sitúa en el año
2170, y relata el período de formación de Andrew Wiggin, un niño de 6
años con una inteligencia brillante, en la Academia militar que le
preparará para dirigir a las tropas humanas contra los Insectores (una
especie alienígena que estuvo a punto de destruir a la humanidad en su
primer enfrentamiento). Pero eso será en el caso de que Andrew, quien se
denomina a sí mismo Ender, consiga superar todas las pruebas a las que
se verá sometido.
Me
encanta este libro por muchos aspectos:
- En primer lugar, porque “el
juego” en el que compiten los chicos de 6 a 14 años, es un juego de
guerra en gravedad cero, en el que se enfrentan dos escuadras lideradas
por un comandante.
- El juego está perfectamente descrito, y las batallas
son muy visuales y te las imaginas completamente, lo que las hace
divertidas en sí mismas.
- Por
otro lado, el autor describe con maestría los estados de ánimo del
protagonista, quien constantemente reflexiona sobre el sentido del
juego, sobre sus compañeros, sobre
su familia… Es un niño sometido a una gran presión, y se cuestiona si
tiene sentido todo el sufrimiento que le hacen pasar por el simple hecho
de tener que salvar a la humanidad...
Los análisis estratégicos que se hacen es el bazo fuerte de esta novela: Ender intenta vencer todas las partidas empleando
grandes dosis de imaginación, innovando constantemente, desarrollando
nuevas formas de pensar y de ver las cosas.
Muy
recomendable si te gustan los libros de ciencia ficción, pero también si
te apasiona la estrategia. A pesar de que no te guste el género, es un clásico (contemporáneo) que hay que tener leído.
Valoración: 8´5/10
ORSON SCOTT CARD
Nacido el 24 de agosto de
1951, Card es mormon practicante y fue misionero en Brasil. En 1978
obtuvo el Campbell Award de 1978 para autores nóveles. Su obra se
caracteriza por incidir principalmente en los sentimientos y emociones
de sus personajes y sus historias suelen ser violentas y emotivas. Su
éxito llego en 1985 con la Saga de Ender y la obtención por dos años
consecutivos de los premios Nebula y Hugo. Otra constante de la obra de
Card es la descripción de la maduración de jóvenes superdotados que
llegan a la edad adulta asumiendo los compromisos que de esa
circunstancia resulta.
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